Quería vivir un semestre de mi prepa fuera de México para practicar un idioma nuevo. Decidí que el inglés era el que debía perfeccionar primero así que Canadá era el país ideal. Estuve un semestre del año 2013 en la ciudad de Saskatoon. Cursé el primer semestre de mi prepa en la escuela de Saint Joseph High School con todo el miedo y la emoción de vivir fuera del país que me vio crecer.

Ansiaba ver que tan duro podía ser el invierno de Canadá, (fueron, sin duda, los días más fríos de mi vida hasta ahora). Estaba muy emocionado y feliz antes de irme y cuando llegué, esas emociones se intensificaron en potencia. Canadá es un país súper abierto y amigable de frío clima, pero cálida gente. La escuela en la que estuve fue muy divertida, conocí mucha gente e hice muchos amigos que todavía conservo. El nivel académico estaba muy elevado. Los maestros estaban muy bien capacitados, además de que me ayudaban con regularizaciones en las materias que se me complicaban. Organizaban muchos viajes y actividades especiales para los extranjeros, esto estaba padrísimo porque entre estos programas, habían: deportivos, turísticos, y recreativos. La gente de la escuela era feliz, se notaba que disfrutaban mucho ir a clases y participar en todas las actividades. Además, las instalaciones estaban increíbles, había de todo: canchas, cafeterías, salones y muchas áreas verdes.

Mi peor experiencia fue cuando tuve que caminar de la escuela a mi casa en shorts y playera sin chamarra. Llegué tan helado que hasta la cara me dolía, sentía que se me cortaban los labios. Fue una locura, nunca creí que sentir tanto frio fuera posible.

De las mejores experiencias que tuve fue cuando la familia que me hospedaba me llevó a esquiar en nieve por primera vez. Fuimos a Edmonton, en el norte de Canadá, y me impresioné de lo hermoso que era el paisaje nevado. Un día antes de esquiar fuimos a un partido de hockey profesional, típico canadiense. Me encantó.

De la experiencia entera aprendí mucho a socializar con todo tipo de gente, esto me abrió el panorama y la visión de muchas culturas en el mundo. Me di cuenta que la gente extranjera que está viviendo algo similar a lo que yo, es muy abierta y amigable. Todos compartimos lo que sabemos y conocemos, así nos mezclamos entre culturas.

Recomiendo mucho ese tipo de viajes por que son experiencias inolvidables que te cambian en todos tus aspectos, aparte de aprender nuevos idiomas.